Silueta de luz
recóndito ese lugar donde te guardaste
en los años del tiempo terrestre y mineral.
Tocarte es tocarme en un sueño antiguo
de mares azules y ciudades extranjeras a mi piel.
No sé tu nombre ni tu rostro
todo se funde en la boca del miedo.
Un vacío iridiscente quiere cobijarme
y esas patitas que cosquillean entre el plexo solar y
y el cotidiano estómago.
El salto viene de lejos
olvidado para siempre
y para siempre vuelve.
En cada palabra de vieja tinta amorosamente pensada
tendiendo la cuerda
del recuerdo
del conjuro al temor de ser pasado tan de lejos.
Difícil las letras
difícil
tal vez sólo sea crecer la semilla
alegría del sol que no defrauda
tocar la punta de los dedos
suavemente
aventurar verdades del alma.
recóndito ese lugar donde te guardaste
en los años del tiempo terrestre y mineral.
Tocarte es tocarme en un sueño antiguo
de mares azules y ciudades extranjeras a mi piel.
No sé tu nombre ni tu rostro
todo se funde en la boca del miedo.
Un vacío iridiscente quiere cobijarme
y esas patitas que cosquillean entre el plexo solar y
y el cotidiano estómago.
El salto viene de lejos
olvidado para siempre
y para siempre vuelve.
En cada palabra de vieja tinta amorosamente pensada
tendiendo la cuerda
del recuerdo
del conjuro al temor de ser pasado tan de lejos.
Difícil las letras
difícil
tal vez sólo sea crecer la semilla
alegría del sol que no defrauda
tocar la punta de los dedos
suavemente
aventurar verdades del alma.
En plena libertad de ser
en cada acorde violeta y brillante
en las sonrisas simples
en nuestra mejor luz.
en cada acorde violeta y brillante
en las sonrisas simples
en nuestra mejor luz.
Me gustó tu blog y me gustó este poema.
ResponderEliminar¿Me das permiso para enlazarlo al mío?
Claro! Gracias! Y yo que te agregué a mi pequeña lista sin permiso!!!
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